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Las kokedama y las plantas

La kokedama

En Omotesandō trabajamos con plantas al estilo kokedama. Literalmente, ‘Kokedama’ significa bola de musgo y es una variante del bonsái que empezó a hacerse hace unos 500 años en Japón. La bola de musgo actúa como sustituto de la tradicional maceta.

En Omotesandō nos hemos inspirado en esta técnica japonesa y en la idea que hay detrás para traer un trozo de naturaleza dentro de tu hogar.

 

Decoración y colocación de la kokedama

Decoración

La belleza de la kokedama hace que quede bien en todas partes. La puedes poner encima de una base que puede ser de madera, de pizarra, de cerámica u otros materiales. Incluso puedes utilizar platos. La kokedama se adapta a todos los ambientes y estilos. Y si quieres dar un toque de decoración diferente, puedes colgarla. Son famosos los jardines flotantes de kokedama.

Colocación

Se recomienda colocar la kokedama en un lugar con luz pero protegido del sol directo. También es preferible que esté alejada de corrientes de aire y de calefacción directa. La mayoría de kokedama son plantas de interior, pero si se trata de una planta de exterior, también se recomienda colocarla alejada de la luz directa del sol y de los corrientes de aire fríos y calientes.

 

Cómo regar la kokedama

La kokedama se riega por inmersión. La frecuencia de riego depende de la estación del año. En general:

  • Primavera / Verano: 2 o 3 veces por semana, cuando veas que el musgo ya está seco.
  • Otoño / Invierno: 1 o 2 veces cada diez días, también cuando veas que el musgo ya está seco.

Pasos a seguir cuando la riegues:

  1.  Sumergir la bola de musgo en un bol con agua hasta cubrirla toda.
  2. Esperar que acaben de salir burbujitas de dentro del musgo.
  3. Sacarla y dejarla escurrir hasta que ya no gotee más.
  4. Ya puedes volver a colocar tu kokedama en el lugar donde hayas escogido!

 

Las plantas

Cómo cuidar las plantas

¡Aquí tienes algunos trucos para cuidar tus plantas!

1. Ni poca, ni mucha. Las plantas necesitan ser regadas pero no en exceso. Las plantas aguantan mejor la falta de agua que el exceso. De todos modos, cuidar de una planta no es tarea difícil.

2. La gran mayoría de plantas necesitan ser regadas una vez por semana. Los cactus y las suculentas, son una excepción. Se tienen que regar cada dos o tres semanas.

3. ¿Quieres saber si ya toca regar tu planta? Pon el dedo 2 centímetros dentro del sustrato mineral. Si el sustrato está seco, es hora de regar. Casi todas las plantas prefieren un sustrato un poco húmedo.

4. Cuando riegues tu planta, la cantidad de agua que tienes que poner tiene que ser más o menos equivalente a un tercio de la capacidad de la maceta. El agua tiene que estar a temperatura ambiente.

5. Normalmente, las plantas necesitan ser colocadas en un lugar donde les dé la luz de manera indirecta. De todos modos, hay plantas que están mejor en otras ubicaciones.

6. Haz una pequeña búsqueda de tu planta en internet y mira cuales son sus necesidades más específicas.

Si sigues estos consejos, tu planta estará bonita y feliz. ¡Disfrútala!

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